Que lástima que no seas una reina déspota, que no tengas el poder de cortar cabezas. Yo prendo la radio, vos cambiás de estación o lees el diario. Yo viajo a mercurio y te mudás de luna en luna. Te encuentro en la calle, mi percepción se resquebraja, vos me conocés sin más sentimiento.
Sé que hay universos paralelos, pero harían bien en no cruzarse cuando el tren de tu mirada me atraviesa y sigue, sigue hacia donde no soy nadie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario