sábado, 16 de febrero de 2013

Verdades

Mentís, sé que mentís pero no sé si vos sabés. Sonreís  de esa forma y no sé si sos feliz cuando mentís. Yo también miento y no te acuso de nada, pero no quisiera que después la culpa de haber mentido te oprima los labios.
El que dijo que la verdad libera seguro no era abogado. Aunque pudo haberlo dicho con ese gesto solemne que ponés mientras meneás tu cabeza y ya no podés abandonar, porque estás enterrada hasta el flequillo en tu mentira. Yo te escucho por no poder sacarte de ahí sin hacerte algún daño, por más que piense que de todas formas sos maravillosa y que no te hace falta ninguna mentir, porque llegado el caso, yo me mentiría por vos todo lo necesario.

No hay comentarios: